¿Qué son las parafilias y en qué se diferencian de otros trastornos sexuales?

Todas las parafilias tienen cuatro cosas en común. En primer lugar, se caracterizan por fantasías sexuales, impulsos acuciantes o conductas excitantes recurrentes e intensas dirigidas a objetos inadecuados. Segundo, estos deseos y fantasías acuciantes se prolongan más de seis meses. Tercero, causan notable tensión o perturban la actividad cotidiana y además hay parafilias que implican objetos no humanos, niños o adultos, que no dan su consentimiento, y las hay que se centran en la humillación de la pareja. Las parafilias se producen  también casi exclusivamente en los hombres.

La diferencia crucial entre las fantasías sexuales normales y anormales es lo apropiado de su orientación. Por ejemplo, pensar constantemente en realizar actos sexuales con niños o tratar de hacerlos se ajusta a la definición de parafilia, pero estar pensando siempre en hacer el amor con la esposa o hacerla a la primera ocasión no cumple el criterio definitorio. Todos tenemos momentos pasajeros en que pensamos en fantasía sexuales, pero cuando estos pensamientos se convierten en preocupaciones que destruyen la inhibición conductual, las consecuencias pueden ser graves.

Estas son las ocho clases más corrientes de parafilias y todas ellas implican fantasías, deseos acuciantes o conductas:

  • Exhibicionismo o exposición de órganos genitales ante una persona desconocida
  • Fetichismo o uso de objetos para aumentar la satisfacción sexual
  • Frotarse, tocar o restregarse con otras personas sin su consentimiento
  • Pedofilia o actividad sexual con niños pre púberes.
  • Masoquismo o deleitación en actos sexuales que causan auto humillación o dolor
  • Sadismo o excitación sexual mediante actos que causan dolor o humillación a otra persona
  • Travestismo fetichista o actividad sexual de varones heterosexuales que conlleva el vestir prendas femeninas
  • Voyerismo, consistente en observar a escondidas a otras personas desvistiéndose o realizando actos sexuales

Aunque cualquier de estas parafilias puede constituir un grave trastorno mental, hay casos en que concurren varias a la vez, creando una difícil situación para el diagnóstico y el tratamiento al profesional de la salud mental.

 

 

 

(información extraída de Trastornos de ansiedad en la infancia / Enrique Echeburúa Odriozola, 2006)

 

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